Compré mi identidad en un chino.
Buscaba ser único, ir abriendo camino
sin olvidar la parte económica del asunto.
No era cuestión malgastar el peculio.
Muy ufano la sacaba a relucir
martes y jueves excepto en abril.
Mas ahora esto maldigo
pues igual soy a todo hijo de vecino.
Es normal a precio tan barato
ir comprando personalidad de saldo.
Horda de clónicos seres únicos
desteñidos por la mala calidad.
Uniformes en su individualidad
y sus rotas costuras sin hilo.
La próxima vez la encargo a un artesano
que la fabrique poco a poco con sus manos.
sábado, 26 de junio de 2010
martes, 22 de junio de 2010
sábado, 12 de junio de 2010
Lóbrego
El color de las paredes es negro, el viento entra por la ventana en una leve brisa que mueve lentamente las cortinas hacía un infinito vaivén. La mirada decora una tenebrosa secuencia. Debajo de los muebles hay una suciedad eterna por la quietud de estos. La luz es tenue, anochece. Sorprende el aroma a aire puro en el ambiente de putrefacción en el que se situa. La cama esta vacia, solo la llenan los oscuros edredones. Hay un espacio lleno de objetos que desconozco su utilidad. La soledad demora en este habitat. El cosmos es desagradable pero te adaptas. No hay puerta, el camino esta despejado, empuja hacía algo brillante, pero te asusta el seguirlo. El suelo es viejo. Rojo es ahora el que la pared decora pero no ha habido cambios. Encerrado te encuentras a pesar de que el camino está despejado. Hay lamparas pero no enardecen, te ruborizas. Sigue oscuro. Ya no hay cortinas.
miércoles, 9 de junio de 2010
La Colmena
La colmena de Camilo José Cela es uno de mis libros favoritos y recomiendo su lectura. La trama se ubica en tres días de invierno del Madrid de la posguerra. No tiene un proganista único sino que va describiendo el quehacer diario(también la búsqueda existencial) de bastantes personajes. En la parte final del libro hay un índice con todos los que aparecen en el libro y hay algo más de trescientos. Aunque se prodría considerar que una docena son los más importantes. Hay personajes de toda clase social y teje un magnífico tapiz con sus vidas. Este fragmento me gusta especialmente porque refleja el trasegar de la gente en las ciudades.
Los bancos callejeros son como una antología de todos los sinsabores y de casi todas las dichas: el viejo que descansa su asma, el cura que lee su breviario, el mendigo que se despioja, el albañil que almuerza mano a mano con su mujer, el tísico que se fatiga, el loco de enormes ojos soñadores, el músico callejero que apoya su cornetín sobre las rodillas, cada uno con su pequeñito o su grande afán, van dejando sobre las tablas del banco ese aroma cansado de las carnes que no llegan a entender del todo el misterio de la circulación de la sangre. Y la muchacha que reposa las consecuencias de aquel hondo quejido, y la señora que lee un largo novelón de amor, y la pequeña mecanógrafa que devora su bocadillo de butifarra y pan de tercera, y la cancerosa que aguanta su dolor, y la tonta de la boca entreabierta y dulce babita colgando, y la vendedora de baratijas que apoya la bandeja sobre el regazo, y la niña que lo que más le gusta es ver cómo mean los hombres...
Los bancos callejeros son como una antología de todos los sinsabores y de casi todas las dichas: el viejo que descansa su asma, el cura que lee su breviario, el mendigo que se despioja, el albañil que almuerza mano a mano con su mujer, el tísico que se fatiga, el loco de enormes ojos soñadores, el músico callejero que apoya su cornetín sobre las rodillas, cada uno con su pequeñito o su grande afán, van dejando sobre las tablas del banco ese aroma cansado de las carnes que no llegan a entender del todo el misterio de la circulación de la sangre. Y la muchacha que reposa las consecuencias de aquel hondo quejido, y la señora que lee un largo novelón de amor, y la pequeña mecanógrafa que devora su bocadillo de butifarra y pan de tercera, y la cancerosa que aguanta su dolor, y la tonta de la boca entreabierta y dulce babita colgando, y la vendedora de baratijas que apoya la bandeja sobre el regazo, y la niña que lo que más le gusta es ver cómo mean los hombres...
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Cosas del Poetastro,
Ingenio foráneo
martes, 1 de junio de 2010
Carta Blanca
Este entretenido juego de solitario de Windows al que todos hemos jugado alguna vez tenía para mí una leyenda sobre encima: siempre había oído que todos los juegos se podían resolver, además en el apartado "Introducción a Carta Blanca" de la ayuda pone en una nota a pie de página lo siguiente:
"Se considera que es posible ganar en todos los juegos (pero no se ha demostrado)"
Como de vez en cuando me da por jugar, hoy lo he vuelto a hacer y me ha venido a la cabeza el mito... Buscando así, de buenas a primeras en el google, lo primero que he podido observar es que salían unos vídeos del yutube que inducían a pensar que la historia era verdad, ya que eran resoluciones de juegos planteados como difíciles, pero solo era a primera vista.
Investigando más, he llegado a la página de Carta Blanca de la Wikipedia en ingés (FreeCeell). Una vez hecha la operación copiar-pegar en el traductor del google he podido comprender todo el asunto y aprender algo que va a ser únicamente válido para ser contado aquí.
Se ve que la Carta Blanca tiene un paquete de 32000 juegos genuinos y luego a parte muchísimos más de ellos concretamente 967999 de ahí que cuando le das a seleccionar juego ponga de 1 a 1000000 (el juego 1000000 no existe).
El caso es que a un hombre que no tenía mucho más que hacer y al que probablemente le gustaría este blog se le ocurrió mandar a gente ociosa, como él y como todos nosotros, que le fueran tirando a los 32000 juegos a ver si se resistía alguno y efectivamente dieron con el maldito, la combinación imposible de Carta Blanca, el que rompe las estadísticas, el juego #11982.
Ninguna persona ha sido capaz de resolverlo y es normal, porque para ello se necesitarían tener 5 huecos en lugar de 4.
En realidad con la expansión hay 8 juegos imposibles 11,982; 146,692; 186,216; 455,889; 495,505; 512,118; 517,776 y 781,948 que igualmente requerirían 5 huecos libres.
Pero alguien se quedó con la mosca detrás de la oreja y cabezoneó otro poco (y seguro que lo hizo por contarlo nada más) generó otro chorro de juegos y sacó que entre los 10 primeros millones hay 130 imposibles. Se ve que cuando proclamó su descubrimiento le salió otro más cabezón y zamarro que él a la par que indolente. Este otro personaje examinó 100 millones de juegos así por las buenas y ya con el dedo artrítico de tanto "click aquí, click allá" dio a conocer al mundo su verdad: entre los primeros 100 millones de juegos de Carta Blanca hay 1282 que no se pueden resolver.
Andad con Dios y no corráis.
"Se considera que es posible ganar en todos los juegos (pero no se ha demostrado)"
Como de vez en cuando me da por jugar, hoy lo he vuelto a hacer y me ha venido a la cabeza el mito... Buscando así, de buenas a primeras en el google, lo primero que he podido observar es que salían unos vídeos del yutube que inducían a pensar que la historia era verdad, ya que eran resoluciones de juegos planteados como difíciles, pero solo era a primera vista.
Investigando más, he llegado a la página de Carta Blanca de la Wikipedia en ingés (FreeCeell). Una vez hecha la operación copiar-pegar en el traductor del google he podido comprender todo el asunto y aprender algo que va a ser únicamente válido para ser contado aquí.
Se ve que la Carta Blanca tiene un paquete de 32000 juegos genuinos y luego a parte muchísimos más de ellos concretamente 967999 de ahí que cuando le das a seleccionar juego ponga de 1 a 1000000 (el juego 1000000 no existe).
El caso es que a un hombre que no tenía mucho más que hacer y al que probablemente le gustaría este blog se le ocurrió mandar a gente ociosa, como él y como todos nosotros, que le fueran tirando a los 32000 juegos a ver si se resistía alguno y efectivamente dieron con el maldito, la combinación imposible de Carta Blanca, el que rompe las estadísticas, el juego #11982.
Ninguna persona ha sido capaz de resolverlo y es normal, porque para ello se necesitarían tener 5 huecos en lugar de 4.
En realidad con la expansión hay 8 juegos imposibles 11,982; 146,692; 186,216; 455,889; 495,505; 512,118; 517,776 y 781,948 que igualmente requerirían 5 huecos libres.
Pero alguien se quedó con la mosca detrás de la oreja y cabezoneó otro poco (y seguro que lo hizo por contarlo nada más) generó otro chorro de juegos y sacó que entre los 10 primeros millones hay 130 imposibles. Se ve que cuando proclamó su descubrimiento le salió otro más cabezón y zamarro que él a la par que indolente. Este otro personaje examinó 100 millones de juegos así por las buenas y ya con el dedo artrítico de tanto "click aquí, click allá" dio a conocer al mundo su verdad: entre los primeros 100 millones de juegos de Carta Blanca hay 1282 que no se pueden resolver.
Andad con Dios y no corráis.
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